Fotografía-Miguel Angel Caprara

Miguel se fué de repente, cuando se animaba a mostrarnos su mundo, como nunca antes.

A los 58 años, falleció Miguel Angel Caprara, un excelente fotógrafo, que no quería esconder sus secretos. Se mostraba siempre dispuesto a comentar sus obras, y revelar sus técnicas, con extrema paciencia. Fué un maestro que se animó a lo digital, luego de haberse resistido y atrincherado en los químicos. Generó llamativos trabajos surrealistas, con personajes y paisajes de sus fotos analógicas, entremezcladas en la magia nueva de los bits. Hace pocas semanas, presentó sus trabajos y dialogó con los alumnos de la Escuela de Fotografía, comprometiéndose a una clase especial. Berazategui tiene el triste privilegio hoy, de haber sido el primer lugar, en donde expuso sus obras digitales, y al mismo tiempo el último.  

 

 

Son esas noticias que uno no se espera nunca, porque la muerte siempre obliga a mirar sobre nuestros límites, nos hace sentir finitos, nos lleva a hurgar en nuestros deseos aun no cumplidos, y nos apura en promesas de aquello que nos debemos y postergamos. Sergio entró a clase distinto, apagado y en silencio. Nos comentó que un fotógrafo ( y principalmente un amigo), nos quedaba debiendo una clase, que jamás llegaría, a pesar de ser hombre de palabra. Miguel Caprara se iba repentínamente, pero dejaba el recuerdo de un hombre sencillo y lleno de humor, que había compartido charlas con muchos de nosotros, de igual a igual. Su obra quedaba de alguna manera, en ese tiempo extraño que no tiene límites, ese tiempo que vence a la muerte y perdura en sus imágenes.

 

Durante 2005, un grupo de alumnos de la Escuela municipal de Fotografía, se acercó a su casa, y lo entrevistó para conocerlo más en profundidad. COMIENZOS Comenzó con la fotografía a los veintiocho años. Siendo Maestro Mayor de obras, en 1968 trabajó en el Complejo Ferrovial Zárate Brazo Largo y allí empezó a realizar sus primeras tomas.Dándose cuenta que le gustaba, comenzó a jugar con ellas y hasta su propio jefe reconoce en él su pasión llegando a copiar sus fotos.Su primer intento de fotografía artística fue con un trabajador vial que realizaba su tarea con un martillo neumático. Como es de suponer la foto salió "movida". A partir de allí, el laboratorista comenzó a interesarse por sus trabajos aconsejándole que estudiara fotografía, cosa que hizo en Villa Ballester a instancia de una amiga. Pero a la segunda clase se aburre y abandona el curso.Pide trabajo en un laboratorio como ayudante sin cobrar, sólo porque quería aprender, el dueño se lo permite pero con la condición de que no molestara al laboratorista.Así transcurren dos meses pasando las copias de la cubeta del fijador a la del agua de lavado cuando el laboratorista se lo indicaba. Luego, otros dos meses pasando las copias del detenedor al fijador y luego de otros dos meses más, llega a revelar sus propias fotografías.

 

El dueño de la casa de fotografía (Remigio Vaccari) era muy exigente en la calidad de sus trabajos teniendo que copiar varias veces fotografías que aparentemente estaban bien hasta lograr la perfección. FOTOMONTAJE Los primeros trabajos de fotomontaje nacen con la idea de componer una fotografía con distintos elementos a partir de fotografías analógicas.Por ejemplo en una fotografía de un árbol por qué no podrían salir volando unas palomas justo en el momento oportuno y, de ésa forma, darle el movimiento necesario.Su primer trabajo, fue una fotografía de una carrera de moto cross en el que el cielo en la toma original era totalmente blanco. Como en los concursos, el cielo blanco no es bien visto, le agrega unas nubes.De ésta manera comienza a ver a la fotografía de otra forma ,es decir, en una salida para un concurso saca fotos de todo lo que lo rodea: nubes, empedrados, árboles, espejos de agua, etc; y luego, en el laboratorio, arma la foto que quiere con los elementos obtenidos. En el año 1974 arma, sin saberlo, lo que en la actualidad se llaman trípticos. En una carrera de caballos en el hipódromo de Hurlingham fotografía varias veces a un hombre que miraba una y otra vez al programa y a un billete de cinco pesos.

 

Luego, en el laboratorio juntó tres fotos cada una en un círculo y la llamó: “Los últimos cinco mangos” Cuando se habla de fotomontaje pensamos siempre en una obra realizada con un mínimo de dos negativos.No obstante nos comentó un fotomontaje por él realizado con sólo un negativo. Se trata de una toma en un partido de bochas en la que en un primer plano se ven un bochín y una bocha y en un segundo plano al jugador en un tamaño mucho mayor que lo que aparece en el negativo original. Esto se logra imprimiendo primero las bochas y luego al jugador ampliado levantando el cabezal de la ampliadora.Los fotomontajes más difíciles de realizar son los de grises pues se notan mucho los medios tonos. En blancos ó negros puros es más sencillo. Como ejemplo nos contó la experiencia ocurrida con una fotografía de una pastora y sus ovejas obtenida en Jujuy (totalmente en gama de grises) donde una imagen es el horizonte con la pastora y las ovejas y otra son las montañas. Esta obra ganó el 2° premio en el Salón Nacional de la Secretaría de Cultura en el año 1978.

 

COLLAGE Dado lo dificultoso de la técnica del fotomontaje la abandona en busca de otras formas de transmitir su arte. Así pasa a incursionar en el collage. Pero el realizar tomas armando una imagen con “trozos” de fotografías se pierde una gran gama de grises. OXIDACION Siempre con el ánimo de investigar nuevas técnicas, observa en el año 1980 y de forma casual lo que ocurre con las tiras de prueba desechadas en el laboratorio. Le llama la atención el cambio de color hacia el rojo que experimentan las tiras ya secas. Se le ocurre experimentar con una foto que saca del revelador y no la pasa por el detenedor y fijador dejándola secar. Acelera el secado con un secador de pelo, encendiendo luego la luz la foto toma una tonalidad rojiza. No obstante nota que el proceso es muy lento por lo que se le ocurre utilizar un flash electrónico para acelerar el proceso. Así obtiene distintos efectos eligiendo aquellas zonas de una fotografía que no quería modificar las “pintaba” con un hisopo embebido primero con detenedor y luego con fijador. Luego de infinidad de pruebas logra controlar el proceso recién en 1982 pudiéndose resumir la técnica como sigue:

La fotografía se amplía y se revela a fondo.

Se deja secar el revelador sobre la copia

Se expone la copia a la luz de un tubo fluorescente

Se pintan a pincel con revelador ó fijador usado las zonas elegidas

logrando distintos colores (amarillo, ocre marrón)

Se continúa con el proceso normal detenedor-fijador.

El proceso se llama oxidación pues eso es lo que ocurre, se oxidan los haluros de plata que forman la imagen. Con éste proceso logra gran impacto en sus obras sobre todo en el exterior. ALEJAMIENTO

En 1986 se aleja de la fotografía artística cansado del ambiente. En éste impasse vive de la fotografía social y publicitaria sin presentarse a ningún concurso.

RETORNO En 2002 el Director del Foto Club Buenos Aires lo anima a exponer sus obras viejas dado que él no estaba haciendo cosas nuevas debido a un mal momento económico.Para poder volver a la actividad artística decide buscar un sponsor y cambia material fotográfico por publicidad. Así logra exponer sus obras viejas y otras nuevas con la técnica de la oxidación. En Europa se enteran de su vuelta (lo creían muerto) y le solicitan que les envíe material por correo electrónico. Con el envío de material (aclarando que eran fotos analógicas escaneadas) comienza a incursionar en la tecnología digital. DIGITAL Dado que no poseía el equipamiento informático necesario para poder escanear sus trabajos, Raúl Villalba lo invita a su casa y así logra archivar sus obras en la PC. A partir de aquí y trabajando con el programa "PHOTOSHOP", comienza a modificar sus fotografías. Villalba le comenta que hay dos concursos en el exterior uno en los EE UU con un primer premio de u$s 2000 y otro en Europa (España) con un primer premio de 6000 euros.Lo estimula a enviar algunas de sus obras por correo electrónico y sin mucha confianza en sí mismo las manda.Es así como obtiene el primer premio en el concurso de los EE UU (u$s 2000).Con dicho premio y con la venta de una cámara de gran formato de su propiedad (Sinar) logra equiparse adquiriendo una PC, un scanner, software y una cámara Canon reflex digital. 

 

*Trabajo realizado por alumnos de la escuela de fotografía de Berazategui, año (2005). Gracias a: Jorge Neve, Estela Romero, Oscar Viltes, y Gabriela Sendega y a los compañeros que recopilaron este trabajo.

Mas información sobre Caprara.

Fotorevista.Biografia

Parte de su obra

Antimedio del Sur.