TEATRO- EL GRAN DEPORTE NACIONAL

En el Teatro “El Taller” (calle 6 N° 3672 de Berazategui) se presentó hace pocos días “EL GRAN DEPORTE NACIONAL”, en principio, una comedia de enredos, que muestra como por el escape de dos ladrones (Carlitos y El turco) que se refugian en una iglesia, se termina destapando varias cuestiones ocultas de las personas de un pueblo.

Todo sucede en La Maruja, un paraje inhóspito de La Pampa, cuando luego de robar un almacén, dos malhechores (algo torpes e inexpertos) ingresan a la capilla del padre Marcos y terminan tomando de rehenes a todos los que allí se encuentran. Lo cierto, es que tras el momento de tensión inicial generado por la llegada de los fugitivos, todo empeora aún más, al encontrarse rodeados por la policía. Será el comisario Gomez (un impecable José Lo Russo en ese papel) el encargado de comenzar a negociar, para que todo salga bien, o quizás no tanto como imaginamos.

Entre los que están dentro de la capilla (rodeada por Gomez y su equipo) se encuentran Olinda, Molina y Martita, tres mujeres que conocen al detalle los secretos del pueblo, los amoríos, las desgracias, y los pecados de todos sus vecinos, pero que se niegan a reconocer sus propias debilidades y limitaciones. Estas mismas, se irán mostrando descarnadamente, mientras avanza la redada. Ante un atónito padre Marcos que trata de mediar con sus particulares bendiciones (muy bien en el papel Ricardo Moren) las mujeres escupirán chismes, intimidades y situaciones grotescas, desnudando las debilidades de todos.

Si bien la obra, como dijimos, se encuadra dentro de una comedia, el acierto de esta adaptación del texto de la autora Sonia Daniel, realizada por el director Pablo Zumbo, es poner el foco en la denuncia política y agregar un giro dramático en medio de las risas, con un fragmento que atraviesa afiladamente la realidad y parece escaparse de la ficción. Es que luego de tantos enredos y entredichos graciosos, “la india”, la que está siempre callada y obedece, Eluney (una excelente Stela Maris Nuñez que sorprende por su ductilidad y manejo de los tiempos) se despacha entre llantos, con un discurso que no solo descubre la hipocresía de los que están en la capilla, sino que desgrana las miserias que atraviesa una sociedad, que oculta, discrimina y persigue a base de pura apariencia.

Luego de la intervención de la india, todo seguirá como antes. Los medios de comunicación, transmitirán en vivo la toma de la capilla, sacando el debido provecho de la situación. Desde las frases de una afamada conductora, “Tita Mancilla”, se aportarán análisis y opiniones, con una dosis de infinitos prejuicios sobre los supuestos ladrones (a quien llama “marrones”) y hará que la audiencia se mantenga entretenida con el espectáculo cotidiano de la inseguridad.

El final no puede contarse pero si imaginarse. Puede decirse que la capilla será desalojada por la pericia y las negociaciones del oficial Gomez. El pueblo, intentará volver a la tranquilidad, luego de ser sacudido por el operativo policial, pero ya nada será como antes. Muchas verdades habrán sido reveladas, y los límites de lo moralmente correcto, quedarán tan difusos, como el inesperado desenlace.   

FICHA TÉCNICA:

Personajes:

 

Olinda: Mirta Susana Pereyra

Eluney: Stela Maris Núñez

Padre Marcos: Ricardo Moren

Martita: Gabriela Galafazzi

Molina:  Alicia Ferrara

Carlitos: Nahuel Rivero

El Turco: Pablo Sosa

Comisario Gomez: Jose Lo Russo

Tita Mansilla: Elizabeth Núñez

Dorita Parrota: Ludmila López

 

Adaptación y dirección general: Pablo Zumbo

(adaptación libre del texto de Sonia Daniel)

Asistencia de dirección: Miguel Zevrnja

 

Duración aproximada: 1hora 20 minutos